El rector de UIC Barcelona, Alfonso Méndiz, compartió su experiencia y conocimientos sobre cómo las series televisivas influyen en los valores y actitudes de la sociedad contemporánea. Méndiz, catedrático de Comunicación Audiovisual y Publicidad, durante su sesión, utilizó ejemplos recientes de la industria del entretenimiento para ilustrar su análisis.

En este sentido, Méndiz destacó el impacto de series como El juego del calamar, que generó un gran revuelo en colegios e institutos de países como Bélgica, Reino Unido y España, o Por 13 razones, cuyo visionado por muchos jóvenes se vinculó a un aumento de casos de suicidio entre adolescentes norteamericanos. Otros ejemplos que destacó fueron las serie El tiempo entre costuras, que generó un aumento desorbitado de las ventas de máquinas de coser, y Gambito de dama, que suscitó en todo el mundo un gran interés por el ajedrez, generando más de 20 millones de federados nuevos en todo el mundo.

Según Méndiz, los estudios de psicología de la imagen y teoría de la comunicación audiovisual revelan tres efectos principales de las series en los valores de la audiencia. En primer lugar, destacó el efecto de socialización: las series nos introducen en un mundo compartido de valores, pues son actualmente el medio de educación informal más poderoso para el público juvenil. En segundo lugar, señaló el efecto de legitimación, “mediante el cual las series normalizan comportamientos o situaciones controvertidas al presentarlas como algo natural, aceptado socialmente, legitimado ante todos sin necesidad de justificación”.

El ponente también mencionó un tercer efecto: la “transferencia de personalidad, provocada por la necesidad del espectador de adentrarse en la narración audiovisual; para meterse en ella, transfiere su personalidad al protagonista o al narrador de la historia, y eso le lleva a asumir sus ideales, e incluso a empatizar con ellos. Todo esto se agudiza si hay una previa sintonía con el actor o la actriz principal”.

Por otro lado, Méndiz ofreció consejos para desarrollar un sentido crítico ante el consumo de contenido audiovisual, enfatizando la importancia de cuestionar las representaciones que una serie determinada ofrece de la familia, la amistad o el logro de la felicidad, y analizar de manera reflexiva su impacto en nosotros mismos.

La conferencia, que contó con la presencia de los profesores de Comunicación Audiovisual de esa universidad, concluyó con un debate animado sobre el papel de las series televisivas en la formación de valores y la necesidad de fomentar una visión crítica entre los espectadores.