Los alumnos de Arquitectura presentaron seis prototipos de sistemas modulares de fachada para edificios residenciales. Estos sistemas consiguen revitalizar el espacio arquitectónico, generan espacios habitables en la fachada, y tienden al paradigma nZEB (Near Zero Energy Building) con la integración de sistemas activos y pasivos, incluyendo la creación de energía en los mismos edificios.

El proyecto ganador de esta edición, “Babylon”, es un prototipo que añade a los edificios un espacio exterior habitable de medidas generosas y muy versátil en usos, con bancos incorporados a ambos lados que esconden los anclajes e instalaciones. El jurado valoró el alto grado de habitabilidad y de confort que ofrece a los usuarios, además de sistemas de protección y eficiencia energética.

Los seis proyectos abordaron el reto desde ópticas diferentes y complementarias. Se presentaron prototipos de balcones modulares y galerías de diferentes medidas que se pueden anclar en la fachada, y soluciones diversas para la mejora y el aislamiento de las fachadas preexistentes. Los alumnos usaron plantas, materiales reciclados y reciclables, sistemas de colecta de agua de lluvia, etc. Todos los equipos facilitaron detalles técnicos, planos y renders de los proyectos.

En esta ocasión el taller fue dirigido por el director de la UIC Barcelona School of Architecture, Víctor Echarri, y por el también profesor de la Escuela, Ricardo Gómez Val. Por otro lado, el profesor Jordi Roviras fue el coordinador.

El jurado estaba formado por doctores en Arquitectura y expertos en eficiencia energética, sistemas modulares de fachada y bioclimatismo: Javier Neila, profesor en ETSA Madrid; Rufino Hernández Minguillón, ETSA País Vasco; Alberto Meiss, ETSA Valladolid; Alberto Burgos, ETSA València, y Antonio Salmerón, Universidad de Alicante.